El problema es que los comentarios enfrentan directamente su línea editorial y a sus periodistas.
El periódico se ha visto obligado a publicar un editorial en primera plana acerca de cómo el anonimato se ha convertido en el refugio de injurias y recuerda que en otros países como Estados Unidos esto obligó a cerrar la opción de comentarios o exigir el identificarse.
«En lo que concierne a Eltiempo.com, reconocemos la existencia de un problema que, pese a nuestros esfuerzos, no hemos podido resolver. Pero insistiremos…»
La respuesta de los usuarios
¿Cerrar o no cerrar los comentarios?
El caso por lo visto ha pasado los límites. Pero es un «dilema» que los diarios están obligados a encontrar una solución.
Cerrar los comentarios sería demasiado cómodo… Moderarlos significa tener personas dedicadas solo a ello. Gran dilema…
CHRISTIAN ESPINOSA
Periodista
Profesor de Nuevos Medios
Dedicado a la capacitación de Community Managers y Gestión de Redes Sociales. Manejo de Crisis On Line y Vocería 2.0. Mi otra pasión: el periodismo móvil.