Jorge Gobbi, docente de la Carrera de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, mantiene dos blogs que muestran las dos facetas de los periodistas que andamos en la docencia y en la reportería a la vez.

Su mundo académico y la revelación de sus hallazgos y comentarios que aportan a la comunidad conectada se los puede ver en Vida Vacía en el que a través de un lenguaje fácil de digerir nos enteramos de últimas actualizaciones respecto a nuevas tecnologías.

Mientras que en su blog de viaje, se ve el lado del reportero que hace periodismo de viaje pero desde la óptica más práctica y cotidiana: la que normalmente necesitamos saber cuando viajamos y que se da en las conversaciones entre viajeros o interesados en viajar , en este caso, soportado a través de un buen hilo periodístico. (Falta un apartado para Ecuador en su bitácora, desde ya ¿quién se anota para aportar con Jorge? ¿igual colegas y bloggers de otros países?)

Me he reído mucho de su crítica a las notas de turismo que hablan con la muletilla de «lo mágico». «Los destinos no son “mágicos”; apenas si se trata de un truco sencillo para ahorrarnos la descripción. Si el lugar realmente vale la pena, usemos nuestra inteligencia», dice Jorge con referencia a quienes escriben para quedar bien con las operadoras de viaje o quienes les auspician.

Con este colega blogger argentino me he identificado de algunas maneras porque también dio recién una charla de periodismo y blogs, da clases sobre el tema, cursa un masterado, escribe en revistas de tecnología y mantiene su blog a través del sistema wordpress y alojado en el hosting de dreamhost.

La diferencia entre lo que puede hacer un diputado con un blog o con una página personal es evidente cuando se observa la bitácora del senador de Chile, Fernando Flores vs. la del legislador ecuatoriano, Guillermo Haro.

Las comparaciones, es cierto, siempre son odiosas pero en este caso vale la pena analizar cómo el formato blogy su espíritu entregado a crear conocimiento en comunidad arraza con el antiguo y clásico sitio web personal.

Y eso que la página personal del Diputado Haro intenta de alguna manera darle un tinte de interés -a pesar del sentido claro de autopromoción- publicando en forma textual alguna de sus denuncias, seguimiento de sus temas en el Congreso a través de Google News y opciones para comunicarse con su correo.

Pero resulta difícil tapar el sol con un dedo…

Y al mismo tiempo podemos ver por qué aquella idea de que «un blog es una página personal» se queda sin piso. ¿O todavía podemos afirmar que es lo mismo? ¿Qué pasa cuando el ego es el eje de lo que se dice en un blog?

Acabamos el semestre de Periodismo Digital con un grupo de alumnos de la Universidad Católica del Ecuador (sede Ibarra) que recibieron la materia en varios sábados consecutivos. Los alumnos llegaron a la interesante conclusión de que en internet no solo basta saber escribir bien y reportear el mundo off line para llevarlo al formato on line.

Normalmente la carrera de nuevos medios es subestimada por los periodistas de medios tradicionales. Pero, lo cierto, es que este soporte exige por lo mismo mucho más que lo que los medios antecesores han dado.

La diferencia es que hay ser tan buenos, por ejemplo, como un reportero de periódico para investigar y editar pero luego también igual de buenos para desarrollar un valor digital.

Al inicio, los alumnos hacían sus ensayos y los publicaban planos como si hasta ahí llegara el trabajo pero luego vieron que no bastaba: terminaron viendo la diferencia al explotar las posibilidades del hipertexto, dándole interesante profundidad a sus creaciones a través de investigaciones hechas on line, además de proveer notas de contexto, noticias en desarrollo sobre la misma materia, referencias documentales y posibilidad de intercambio informativo.